La risa cura cuerpo y alma

Estudios científicos demuestran que la risa actúa como analgésico, ya que provoca relajación del sistema muscular y producción de endorfinas, reduciendo procesos inflamatorios y dolorosos.

Libera energías negativas y nos inmuniza contra la depresión y el estrés, que tan comunes son en estos días. Las anteriores características son base de la Risoterapia, técnica psicoterapéutica que produce beneficios tanto mentales como emocionales. En Xela, los voluntarios de Fábricas de Sonrisas han utilizado esta práctica para ayudar a personas necesitadas. Para la "Doctora Chinois", integrante de este grupo, la risa relaja, mejora el estado de ánimo y la salud corporal y espiritual.

Beneficios físicos

Reír ayuda a reducir las toxinas del cuerpo, cuida órganos como el hígado, el bazo y el páncreas; favorece la digestión, ya que al aumentar las contracciones del diafragma se produce un masaje interno que mejora el proceso de los alimentos.

Cuando reímos, los glóbulos oculares se humedecen, limpiando los ojos a través de las lágrimas; aumenta la oxigenación del organismo, triplicando las respiraciones y transportando mayor aire a los pulmones.

Beneficios emocionales

Nos hace vivir el momento, nos ayuda a resolver los problemas con calma, nos ayuda a ser optimistas, disminuyendo nuestra tendencia a la crítica destructiva.

Al reír fortalecemos nuestra autoestima y mejoramos nuestras relaciones, pues es un excelente medio de comunicación que rompe con barreras como el enojo.

Opciones para la vida

El doctor estadounidense Patch Adams, creador de la Risoterapia, fue la inspiración para crear "Fábrica de Sonrisas Guatemala".

Existen muchas formas de atraer risas a nuestra vida. Salir con amigos que le diviertan, ver una película cómica, contar chistes o aprender a reírse de sus problemas son algunas de ellas.

Pero si usted desea ir más allá y tener un cambio de vida, puede formar parte de Fábrica de Sonrisas.

Con una nariz roja, bata blanca y un corazón dispuesto a llevar felicidad a quien lo necesite, los voluntarios de este grupo se han convertido en un fenómeno nacional desde su fundación en 2007. Actualmente tienen presencia en Quetzaltenango, Jalapa, Coate peque y fuera de nuestras fronteras.

En la Ciudad Altense, el movimiento sonrisero surge en 2010. Cada semana los doctores de la risa visitan hospitales, asilos y orfanatos para llevar cariño y alegría a las personas necesitadas, previo a una extensa y dedicada preparación.